Una pulsera para la igualdad… con cerebros de colores

Un equipo de siete jóvenes estudiantes de la Universidad de Mondragón se ha propuesto como objetivo que se hable con naturalidad de la igualdad, o de la desigualdad, de género. Quieren promover un pequeño cambio en la sociedad. Y para hacerlo visible han lanzado una pulsera con dibujos de Kukuxumusu.
¿Por qué una pulsera?, les preguntamos. “Porque la llevas siempre contigo y te recuerda en muchos momentos del día que estás luchando por la igualdad”, nos cuenta Uxue Irigoien, una de las integrantes del equipo.
De hecho, en Kukuxumusu hemos diseñado otras pulseras con fines solidarios, como financiar la compra de desfibriladores para evitar la muerte súbita por una parada cardíaca, recaudar fondos para niños con cáncer; y también las hemos hecho para ir de fiesta en fiesta, por supuesto.
En esta ocasión, el dibujo que hemos hecho representa la igualdad con muchos cerebros iguales, cada uno con sus colores diferentes. Con ellos han querido transmitir que hombres y mujeres somos iguales en inteligencia, estamos constituidos por la misma esencia, y eso nos une.
Este movimiento se llama Aldazank (que en euskera significa “cambio” tanto en mascullino como en femenino) y fue presentado públicamente el pasado 8 de marzo, coincidiendo con el Día Internacional de la Mujer. Y lo hicieron en la sede de la Fundación de un club de fútbol, la Real Sociedad.
“Vuestro proyecto tiene una ‘xarma’ (encanto) que no hemos visto en otras iniciativas de este tipo”, les dijeron en la Fundación de la Real. Y es que nacieron con la idea de mantenerse al margen de la política; su principal objetivo es dialogar, escuchar y recoger las propuestas de las sociedad.
¿Dónde han encontrado la inspiración? Uxue Irigoien nos cuenta que fue durante una visita a la Fundación Vicente Ferrer en Anantapur, India. Durante una semana conocieron de la mano de Moncho Ferrer la transformación que está llevando a cabo allí la Fundación.
“Allí descubrimos el sentido de nuestro proyecto. Nos llamó mucho la atención la cercanía con la que nos trataron y los valores que impregnan a la Fundación Vicente Ferrer. De hecho, los hemos incorporando a nuestras acciones”, explica con entusiasmo.
El descubrimiento de la Fundación Vicente Ferrer lo hicieron durante su estancia en India, cuando cursaban tercero del grado LEINN, en la Universidad de Mondragón. “Es una carrera práctica –asegura Uxue Irigoien– que promueve el emprendizaje social, y que rompe con las viejas maneras de aprender”.
Unos estudios cuyo aprendizaje depende mucho de la iniciativa personal y del trabajo de equipo. Algo que en Aldazank lo tienen más que asumido. Los siete trabajan sin descanso para que su proyecto crezca y dé frutos.
Naturalidad, empatía, escucha, cercanía, orgullo por su trabajo y protagonismo de la sociedad. Estos son los principales ingredientes que han tomado del proyecto en India y que ahora elaboran en forma de eventos, debates, análisis, presentaciones, encuentros…
La iniciativa está obteniendo muy buena respuesta en muchos ámbitos e incluso el apoyo de instituciones relevantes, como la Asociación de Profesionales, Empresarias y Directivas de Gipuzkoa (ASPEGI), y la Diputación de Gipuzkoa, que ha aportado el capital semilla necesario para despegar.
La pulsera ya está a la venta, por un precio de dos euros, en los supermercados e hipermercados Eroski de toda Gipuzkoa. Pero si te pilla lejos, puedes solicitarla a través de la página web de Aldazank enviándoles un correo electrónico.