Ricardo Ten: “Hay que aprender a sufrir divirtiéndose”

Ricardo Ten es plusmarquista mundial en 100 metros braza, modalidad en la que ha sido récord del mundo durante muchos años. Es un tiburoncillo en el agua y uno de los seis atletas que integran #SeSalen, el mayor club de aficionados del deporte paralímpico patrocinado por Liberty Seguros.
El valenciano llega a Río con 41 años recién cumplidos y con hambre voraz de colgarse alguna medalla. En su Twitter decía: “Por una medalla de oro en Río sería capaz de correr una maratón”.

Ricardo Ten es plusmarquista mundial en 100 metros braza.
Un accidente eléctrico le dejó, cuando tenía ocho años, sin los dos brazos y sin una pierna. Pero nada le ha frenado a este deportista que considera que lo extraordinario de su vida es que “su vida es extraordinariamente normal”.
Ricardo Ten entrena tres horas por la mañana y dos por la tarde. Usa un tipo específico de gafas en el agua, porque le pone muy nervioso que le fallen o se le caigan mientras nada como un tiburón. Por eso Wolf las lleva puestas en el dibujo que hemos hecho para él en Kukuxumusu.
Los de Río son sus quintos Juegos Paralímpicos. Estuvo en Atlanta, en Sidney, en Pekín, en Londres. Esta vez en Río quiere conseguir una cuarta medalla de oro. Su táctica: no darse nunca por vencido, volver a intentar las cosas una y otra vez.

El nadador valenciano Ricardo Ten perdió sus brazos y una pierna en un accidente eléctrico.
Hace un par de años, le ayudaron a comprar una prótesis de running –que son muy caras– y ya ha corrido su primer medio maratón e incluso hace triatlones. Está casado, es padre de dos hijos, trabaja como administrativo y como monitor de natación.
Suele conseguir casi todo lo que se propone porque pone kilos de tesón, como sacarse el carnet de conducir, a pesar del mogollón de impedimentos que le ponían. Entre las muchas perlas que suele publicar en Twitter, nos quedamos con ésta: “Hay que aprender a sufrir divirtiéndose”.