Premio para Carlos, el dibujante-grafitero de Kukuxumusu

Nuestro dibujante Carlos se va de botes mientras otros se van de potes porque una de sus pasiones es el grafiti. Bote en mano, el Carlos Almagro grafitero es capaz de canalizar su arte a través del espray mientras se divierte y convierte una pared en un lienzo. Pero no solo a la gente le gusta, también al jurado del X Concurso de Grafitis Civigraff 2016 organizado por el Ayuntamiento de Pamplona, que ha escogido una de sus obras para el primer premio del certamen por segundo año consecutivo.
Le damos la enhorabuena a Carlos y a todos los participantes y finalistas que se lo curraron de lo lindo a pesar de la lluvia y el frío. Carlos tiene 23 años y es difícil que se ponga serio, pero a la hora del almuerzo nos ha filosofado un poco sobre que su obra ha querido transmitir una doble lectura: «Por un lado he querido hacer un homenaje a los escritores fantasma que están en todas partes, pero que nadie ve y se mueven como si fueran invisibles. Por otro lado, he querido plasmar una crítica al grafiti que es una disciplina que se basa en pintar más que los demás, pintar más grande que los demás y poner tu nombre en todas partes.»
Carlos nos ha contado que «la realidad del grafiti es que la mayoría de escritores pasan desapercibidos. Nadie mira, la ciudad no para y se va borrando lo que construyes. En un momento vuelves a no ser nadie aunque nunca has dejado de ser invisible. Todos los escritores quieren ser simpre Ghostwriters -como el título de la obra-, pero a todos sin excepción nos abraza la indiferencia social», apunta Carlos. Casi nadie ha entendido nada, pero todos hemos puesto cara de comprenderlo todo.
En Kukuxumusu no dudábamos de la capacidad de nuestro grafitero Carlos porque lo vemos dibujar todos los días, porque en nada lo vamos a mandar a liarla a Madrid y porque grafiteó en junio la tienda de Kukuxumusu en la calle Estafeta tras 48 horas de trabajo, 32 botes de pintura en spray, 34.560 aerosolazos y la visita de 16.123 espectadores. Aquí puedes ver su trabajo.
Aquí el grafiti terminado.
Puedes ver la obra original y las de los diez finalistas en la explanada exterior de Civivox Mendillorri en Pamplona.