10 sinrazones para poner un perro en tu vida

Hay cienmil tratados científicos sobre las ventajas de tener un perro como mascota. Nosotros, ahora que hemos diseñado una colección de accesorios para mascotas con Yagu y ya sabemos perrolatín sobre el tema, nos hemos dejado de ciencia y hemos echado mano de la sabiduría popular perruna. Estas son nuestras conclusiones, no olvides compartirlas con tu perro.
1.- Ahuyentan a los vecinos pelmas
¿Sabes ese vecino brasas del séptimo que te da la turra en el ascensor sobre lo poco que nieva ahora, lo estupendo que se está poniendo desde que va al gimnasio y lo bueno que es Cristiano Ronaldo hasta cuando no juega? Pues le tiene fobia a los perros. Si tienes un perro, te rehuirá en el garaje y se hará el loco para no subir contigo. Ya verás cómo tu sube-baja mejora.
2.- Ligaréis más los dos
Está demostrado: en los pipicanes, los parques caninos y las zonas de perrismo se liga más y mejor. Se empieza hablando de lo mucho que comen, de las vacunas que necesitan y de lo revueltos que están últimamente, y se termina quedando para tomar algo. Si no tenéis pareja, de ahí a comerse el morro hay solo un paso. Cuando lo des, llévate al perro, él también tiene derecho a perrear un poco con su homóloga.
3.- Si te echan de la cama, te dejará su cuna
En caso de que tengas pareja, no te conviene flirtear mucho en los parques, pero si la cosa se te complica y terminas partiendo peras, el perro siempre estará dispuesto a hacerte un hueco en su cuna. Las de Kukuxumusu by Yagu vienen en varios tamaños, así que si no eres muy grande y os apretujáis, podéis caber los dos.
4.- Te despertarán a lametones
No me digas que no te gusta que te despierten a lametones. Si tu pareja está muy ocupada, es más arisca que Putin con resaca o, simplemente, no le van esas prácticas, no te preocupes. Tu perro está programado para despertarte los domingos a limpio lametón. Si estás medio dormida y te emocionas, no te vengas arriba, a él no le gusta que le hagan lo mismo.
5.- Cuéntale tus mierdas, que no te contradirá
Viene muy bien tener un perrico cerca, especialmente si eres single, para contarle todas tus comidas de olla, frustraciones, amores y desamores. ¡Y sin que nadie te contradiga! Siempre te dará la razón si le sacas a pasear y le das de comer, y eso es un placer irrenunciable especialmente si nadie te comprende. Mucho más barato que ir al psicólogo.
6.- Te pondrás como MarathonMan
¿Conoces a alguien que tenga un perro y que no esté superenforma? Nosotros también, pero esos no cuentan porque seguramente son unos vagos y solo pasean a sus perros por el garaje. Esos días en los que se te escapa y corre como un loco por el vecindario, esos otros en los que parece que se ha chutado cafeína y dar seis vueltas a la manzana le parece poco, ese cargar y descargar del coche cada vez que vais de ruta… Terminarás como MarathonMan, ya lo verás. Y él también.
7.- Le podrás poner lo que quieras
Lo bueno de los perros frente a los hijos, sobrinas y primitos, es que estos cuando cumplen 11 años se ponen adolescenraros y nunca les gusta lo que a ti te gusta. Los perros, por el contrario, tienen mejor gusto, generalmente igual que el tuyo, así que les parecerá bien cualquier cosa que les pongas, siempre que les abrigue, no les moleste o les deje llevar su vida perruna tranquilamente. Regálales uno de nuestros abrigos Kukuxumusu by Yagu y verás cómo te quieren más.
8.- Vivirás con un ser con poderes
El perro, como decían los egipcios, es un ser supremo. Si no, cómo explicas que sea capaz de llegar a lamerse lo de abajo. Eso le da una gran independencia que la dedicará a hacerte la pelota más que Inglaterra a Estados Unidos. Además, según los científicos, detecta terremotos, avisa de incendios, descubre otros perros en lontanaza, te trae cosas de muy lejos y siempre vuelve, aunque no te lo merezcas. Todo eso junto en el Mediamarkt son más tres mil euros, y la técnica para operarte la columna y que te llegues a lo tuyo está sin desarrollar.
9.- Te querrá igual… aunque seas un capullo
Es lo que tienen los perros, que te va a querer igual aunque te guste el reggeaton, seas la jefa renegada de la oficina, en la cuadrilla te llamen Caravinagre o te huelan los pies a ajopís. Las personas nos ponemos más exigentes. A los perros les vale con que los quieras, los cuides, los respetes y no los abandones cuando te vayas en verano a Salou o cuando te canses de ellos.
10.-Le podrás hacer perregalitos de fin de año
Aunque no te lo haya dicho, tu perro también cree en los Reyes Majos, Olentzero, Papa Noel y en todas las personas, seres y estares que traen regalos cuando llega fin de año. Pero ojo, que no quieren cualquier cosa. Son perros, no tontos. ¿Sabes ese cuñado que te miró raro cuando le regalaste una corbata de renos en el Amigo Invisible? ¿Te acuerdas cuando a tu madre casi le da un jamacuco cuando los Reyes Majos le dejaron un CD de Extremoduro? Pues no lo repitas. Si te quieres portar con tu perro, regálale algo de la nueva colección Kukuxumusu by Yagu.